Vivir a tiempo completo
“La vida no es un problema a ser resuelto,
sino una realidad a experimentar”
Soren Kierkegaard.
Que la vida no es fácil, a estas alturas, ya lo sabemos todos. Y no, no es rosa… tampoco es negra, más bien es multicolor. En ella hay de todo, hay bueno, maravilloso, menos bueno, malo y terrible. De todo y para todos. Y eso no es ni bueno ni malo, significa que la vida es así.
Cuando miro a mi alrededor y observo muchos de los mensajes que recibimos a través de la publicidad, de las redes sociales… a veces pienso que pretendemos tener la felicidad como un objeto más, de esos que compramos en un supermercado, cogerla, poseerla y disponerla a tiempo completo. La quiero, es mía y me la quedo. Pero la felicidad no entiende de posesiones sino de momentos.
No podemos ser felices todo el tiempo… si lo piensas bien ni siquiera tiene sentido, ¿cómo sentirse feliz cuando alguien a quien queremos enferma?. No, no se puede, no tiene sentido, en esos momentos sólo podemos pensar en arañarnos el pecho para dejar de sentir tanto dolor.
La vida abraza y duele,
la vida te empuja y te acompaña,
la vida te tira al suelo y te levanta.
La vida tiene tantos colores como emociones. La vida a veces es un Todo, y a veces se queda en Nada. Pero siempre la vida es breve, finita, empezada y acabada.
Tenemos la enorme capacidad para hacer grande lo pequeño, para buscar problemas a las soluciones, para creernos eternos, para andar sin mirar al de al lado, siempre ocupados… tenemos la capacidad de temer y de dañar… Hay otras opciones. Tenemos la enorme capacidad para hacer pequeño lo grande, para buscar soluciones a los problemas, para ser conscientes de nuestro momento y aspirarlo hasta sentirlo, aquí… ahora, tenemos la capacidad de parar, de abrazar, de sentir y de amar. Tenemos la capacidad de escoger.
La vida… empeñada en ponernos zancadillas… siempre nos tiene cerca el salvavidas.
Hace tiempo que trato de que los problemas sólo sean eso, problemas, no mi vida. Hace tiempo que trato de poner el foco en aquello que puede darle solución y ponerme a hacer, hacer y hacer… Porque la vida es eso, hacer el camino por el que andas cada día.
Hace tiempo que entendí que para un ratito que estamos… mejor no vivir a medias y vivir a tiempo completo, mejor arañarte por haber tropezado que lucir impoluto sin haberlo intentado, mejor reír a carcajada limpia que sonreír de lado para no despeinarte, mejor amar a abrazo abierto aunque te estrellen a la vuelta, mejor ser yo cien veces equivocada que ser lo que tú quieres, mejor hoy que mañana…
Hoy decido, como dice la canción, vivir a tiempo completo.
¿Y tú?, ¿dónde decidiste poner tus decisiones hoy?.
Un saludo y buen camino.
Almudena Lobato.
Foto: Pixabay.com